miércoles, 16 de enero de 2008

Cultura y perspectiva

El título número 8 para las disertaciones escritas de mayo de 2009 dice así:
Para comprender algo, se debe confiar en la experiencia y en la cultura propias. ¿Significa esta afirmación que es imposible tener un conocimiento objetivo?

Propongo las siguientes consideraciones:

1. En este título se sugieren bastantes cosas de las que ya hemos hablado en nuestros diálogos filosóficos en clase. En concreto, en la pregunta, parece sugerirse que el conocimiento verdadero es el conocimiento objetivo. De hecho la pregunta se podría interpretar así:
¿Significa esta afirmación que es imposible tener conocimiento verdadero, o simplemente, conocimiento?

2. Ya hemos considerado en otras ocasiones qué se puede entender por pensamiento objetivo: aquél que es fruto de mirar la realidad de una manera única y homogénea, de manera que acotemos la singularidad de cada una de las miradas. 'Aprender a mirar al mundo' es, para el pensamiento objetivo, eliminar todos aquellos matices propios que sólo se captan por la singularidad de nuestra mirada. Al hacer esto se consigue que se mire la realidad de la misma manera. Esta forma de proceder facilita la comprensión del discurso a base de empobrecer la realidad.
3. La utilidad del pensamiento objetivo es indudable en algunas materias o disciplinas, en especial aquéllas que se centran en la consideración de determinados aspectos de la realidad físico-material. Es indudable que el sistema métrico decimal nos permite un diálogo sin equívocos entre interlocutores diversísimos. Un carpintero chino, español, e incluso un inglés serán capaces de construir una mesa con la representación métrica de unos planos. El pensamiento objetivo elimina -o reduce- los equívocos.
4. Sin embargo, sería un gran error considerar -como sin duda hace el objetivismo- el pensamiento objetivo como el único pensamiento válido. Existen otras maneras de mirar al mundo.
5. Tampoco cabe entender el pensamiento objetivo como si este fuera un pensamiento 'sin perspectiva', precisamente 'lo objetivo' es su perspectiva. Y el 'objetivismo' la perspectiva absoluta.
6. Por la individualidad propia de todo aquello que tiene una dimensión espacio temporal, y, sobre todo, por la singularidad que representa el actuar del ser libre del hombre, todo hombre contempla el mundo desde una determinada perspectiva. Y es desde esta perspectiva desde donde parte el arranque de todos sus conocimientos. Es una ficción pensar que es posible un mirar que no esté enclavado en una determinada perspectiva.
7. Hacer de una perspectiva una mirada única y absoluta es, precisamente, negar lo que es una visión de perspectiva. Sólo Dios puede mirar sin perspectiva.
8. Existen perspectivas privilegiadas para acceder a la visión de determinados eventos. Sin embargo, la visión desde una perspectiva -para serlo- lleva en ella el reconocimiento de que su perspectiva no le da la visión completa. El hombre no puede tener -simultáneamente- una visión de todas las perspectivas.
9. El perspectivismo no es relativismo, ni escepticismo. Es el reconocimiento, a la vez, de nuestra limitación en el conocer, pero también de la posibilidad del mismo conocimiento.